Independiente Medellín no ganó el partido: Gamero lo perdió con sus cambios incomprensibles. A tan solo 2 minutos de juego, la desconcentración de Vásquez, y la inseguridad de Cuenú y Juan Moreno, llevaron a que se pitara un penal dudoso para Independiente Medellín, que cobraría Andrés Cadavid para el 1-0 al favor del local.

Millonarios tuvo dos equipos completamente diferentes, lo cual obstruyó la generación de crear opciones de gol y ganar el compromiso. En el primer tiempo, Millos llegaba más, tenía más fútbol con los pases claves que generaba Stiven Vega y que de paso ayudaban a remendar el mal tiempo que jugaba Larry Vásquez. El segundo tiempo fue otro equipo Millonarios: desconcentrado, dudoso, desorganizado, sin remates y regalando balones en cada pase que hacían Perlaza, Macallister y Larry. A Gamero no le funcionó retrasar a Vega porque ahí murió el fútbol que se llevaba y más cuando Vásquez venía teniendo un partido desastroso.

Macallister entró perdido y no se le dio un pase clave o un tiro al arco concreto. Ahora bien, no se entiende qué quiso hacer el profe Gamero al sacar a Sosa y Celis cuando eran los jugadores que más generaban y provocaban opciones de empatar el partido: Celis con mucha más gambeta, desborde y Sosa con más potencia de fútbol y precisión de pase para Jader.

Se pierde un partido contra un equipo que, si se miran en las estadísticas, no fue superior a Millonarios, pero que logró aprovechar mejor la oportunidad para anotar y cerrarse. Además, Gamero le ayudó desordenando y desestabilizando al equipo del primer tiempo que intentaba y llegaba más a buscar el empate.

Millonarios: Moreno; Perlaza, Llinás, Cuenú, Murillo; Vega, Vásquez, Celis, Ruíz, Sosa; Valencia.

Cambios: 38’ Silva por Cuenú; 46’ Herazo por Sosa, Guerra por Celis; 71’ Márquez por Valencia, Pereira por Guerra.

@Karol_tatiana29