Tengo presente las primeras noticias que veíamos del nuevo virus que estaba atacando a los habitantes de una ciudad de China. Por primera vez escuchaba los nombres de Wuhan o corona virus, y los noticieros hablaban de cuarentenas y epidemias. Lejos estaba de imaginar, creo que para todos fue así, que nos afectaría de esta manera, cambiando nuestros hábitos de socializar, afectando la economía de los hogares y, si bien no es lo más importante, alejándonos de nuestro amado Millonarios.

Para muchos, Millonarios es un estilo de vida. Toda nuestra vida social, nuestros planes, conversaciones, estado de ánimo, incluso trabajo, giran en torno a cada partido, al gol que nos comemos, a lo que nos dicta la tabla de posiciones, al cumpleaños del amigo del estadio, etc. Compartimos con Millonarios algo estrecho, fundado en el amor y el dolor del resultado de cada torneo; por eso, esa dosis de Millonarios nos hace tanta falta.

Todos queremos sentir de nuevo a Millonarios. Parece lejano el momento de volver al estadio y abrazarnos en cada grito de gol. Parece más cierto el día de ver por televisión al famoso Millos, pisar la cancha de un estadio. Todo depende nosotros y el cuidado que tengamos en medio de la pandemia y el aislamiento obligatorio.

Saldremos siendo diferentes como sociedad y nuestra forma de relacionarnos cambiará. Seguro afectará cómo sentimos a Millonarios, cómo nos acercaremos a ese equipo que nos marca nuestros días, pero nunca cambiará la incondicionalidad, amor y pasión por el azul y blanco de la capital.

Quédate en casa que Millonarios nos espera.

@maugor