Millonarios presentó a sus hinchas las copas obtenidas de la Liga y la Superliga, junto con todas las copas adquiridas a lo largo de la su historia, y esto generó polémica, comparándolo con lo que hizo Nacional en algunas finales del fútbol colombiano. Nada más lejano a la realidad. Millonarios no lo hizo para “aplastar” al rival, lo hizo para darle a sus hinchas la posibilidad de celebrar los títulos que solo pudieron ver nuestros rivales, la oportunidad de ofrecerle a la hinchada durante unos breves minutos un momento hermoso a sus jugadores, el que todo un estadio les diera las gracias por su sacrificio y su gallardía.

Nuestro capitán levantó la copa ante su gente, la que él lleva en su espalda junto a algunos canteranos. Habían muchos niños en la tribuna, asegurando a este Millonarios un futuro que luce brillante; lo que se hizo es una manera de decir gracias a todos esos que siempre estuvimos a pesar de las caídas, a los que siempre pusieron su plata en Millonarios, es un rito para pedirle al tiempo, y al Campín mismo, que no pare de sonreírnos, de darle al hincha, que tiene el escudo bien puesto en el pecho, esos momentos que esta hinchada tanto mereció, rompemos una maleficio que duro casi 30 años, pequeños de 5 años vieron a su equipo campeón y en la víspera de su primera ida al estadio ya tienen 3 títulos, nuestros lugares en el Nemesio ya casi tienen nuevos dueños.

Y a nosotros, una generación sufrida, los que tenemos menos de 30 años nos dieron un momento que soñamos durante largas noches, que habíamos visto solo por videos viejos. Yo estaba con mis papas y mi hermano, eso ejemplifica nuestra historia, ellos dieron muchas vueltas, en cambio mi hermano y yo a pesar de tener una brecha de 12 años hemos visto los mismos títulos. Este momento lo necesitaba la hinchada y desde nuestro presidente Camacho hasta Huerfano también era necesario, para el corazón. Porque todo se cura con amor.

Nacional planeó meticulosamente una estrategia para lograr el pase a la final del 2015, su propio presidente en ese entonces lo aceptó, que en ese entonces era De la Cuesta, que se tramo para hacer sentir inferior a su rival, por eso estaban a lo largo de la cancha y por eso mismo los jugadores del DIM tenían que recorrer sus trofeos para hacer calentamiento, toda una trampa anímica.

Millonarios ubico todos sus trofeos hacia su banco norte, donde siempre se sienta el equipo, los jugadores de Patriotas jamás tuvieron que pasar por un camino lleno de trofeos, eran para nuestros jugadores y para que la hinchada los pudiera ver, nunca estuvieron en el campo de juego; al salir a calentar los jugadores de Millonarios tomaron sus dos copas y las alzaron hacia las 4 tribunas, minutos hermosos,  aunque la hinchada pidió dieran la vuelta olímpica no fue así, las dieron a logística y calentar, acto seguido las copas se devolvieron a las vitrinas y disputamos el partido.

¿Ven la diferencia? No es un acto de prepotencia es un acto de amor, el acto de ofrecer a una familia los logros por los que tanto remamos juntos. Gracias campeones, momentos como estos se guardan para siempre, nos lo merecíamos ustedes y nosotros, que la vida nos premie con un nuevo levantamiento de copa en un Campin azul.

No escribo estas líneas para explicarnos ante los demás hinchas y los medios, ellos jamás lo entenderán, no pueden, pero nosotros la hinchada de estos hermosos colores lo debemos entender porque son estos momentos lo que hace mítico este deporte, disfrútenlos y guárdenlos en el corazón porque si siempre ha estado aquí sabe todo lo que estos valen.

Valentina Cadosch

@Cadosch12