Millonarios sufrió más de la cuenta para sellar su clasificación a los octavos de final de la Copa BetPlay. En el debut del histórico técnico Hernán Torres, el equipo cayó 2-1 ante Real Cartagena en la Heroica, pero avanzó gracias a la ventaja obtenida en el partido de ida. El resultado, además, representó un golpe de realidad tras la victoria del sábado frente a Junior.
Un primer tiempo sin brillo
El primer tiempo fue gris. Millonarios apenas generó un par de aproximaciones claras, aunque supo mantenerse firme en defensa. Dentro de la opaca actuación colectiva, se destacó Alex Castro, siempre activo en el frente de ataque y el más desequilibrante de la nómina azul.
Al minuto 32 del primer tiempo, una falta cometida por Samuel Martín le costó la amarilla y obligó a Hernán Torres a mover sus fichas en el descanso. El lateral dejó el campo para dar paso a Dewar Victoria, lo que forzó a Stiven Vega a abandonar la zona de centrocampistas y ocupar de manera improvisada el carril derecho.
Golpe de realidad
El ajuste se notó pronto. Apenas a los ocho minutos de la segunda parte, tras un tiro de esquina a favor de Millonarios, Real Cartagena lanzó una contra que encontró mal parado al conjunto capitalino y a un Vega que terminó habilitando a Wilfrido de la Rosa. El atacante se internó en el área y, en el mano a mano, Guillermo De Amores no logró resolver de buena forma y cometió un penal que el experimentado delantero Miguel Murillo cambió por gol.
Al minuto 61, Santiago Giordana protagonizó una dura entrada en mitad de campo que el juez central, David Espinosa, sancionó con tarjeta roja directa. La expulsión del delantero argentino obligó al profesor Torres a realizar su segunda ventana de cambios: retiró a Sebastián del Castillo para darle ingreso al atacante Luis Mario Marimón.
El 2-0 de Real Cartagena llegó poco después y por la vía de la pelota quieta. El central argentino Gonzalo Pedroza se levantó en el área, le ganó la posición a Jorge Arias y conectó un cabezazo al piso que se hizo inatajable para el esfuerzo del arquero uruguayo Guillermo De Amores.
Reacción azul y polémica arbitral
Con un hombre menos y en desventaja, Millonarios, a los tumbos, intentó reencontrarse con su fútbol. Beckham David Castro y Luis Mario Marimón se convirtieron en las cartas ofensivas, buscando asociarse para generar peligro. Sobre el minuto 83, una combinación entre ambos terminó con Marimón provocando un penal que le devolvía la ilusión al conjunto azul.
Danovis Banguero asumió la responsabilidad desde los doce pasos y, con un cobro elevado, envió el balón al fondo del arco. Sin embargo, la celebración se frenó de inmediato: el juez central invalidó la acción al detectar que Brayan Cuero había ingresado al área antes de la ejecución, señalando tiro libre indirecto para Real Cartagena. La decisión desató la polémica, pero tras la intervención de su equipo arbitral, la acción fue corregida y se ordenó repetir el cobro. Banguero, sereno, volvió a ejecutar de la misma manera y esta vez el gol sí contó, sellando la clasificación sufrida de Millonarios a los octavos de final.
El estreno de Hernán Torres dejó en claro que aún hay mucho por ajustar, especialmente en defensa y en la generación de juego. En la próxima fase enfrentará a Envigado FC, en una serie que exigirá al máximo al equipo azul si quiere mantener vivo el objetivo de pelear por el título.